
Siempre nos entusiasma ver las actualizaciones de un icono de la industria relojera y, por supuesto, el Rolex Daytona no es una excepción. Los considerables cambios en la caja, la esfera y el movimiento se mantendrán casi con toda seguridad durante 6-8 años, lo que nos da tiempo de sobra para acostumbrarnos a un lavado de cara general de un reloj con el que los entusiastas se han familiarizado de forma innata.